La comarca del Maresme tuvo un papel bastante desconocido y al mismo tiempo muy interesante durante la Guerra Civil. Aunque no se convirtió en frente de combate hasta los últimos días de enero de 1939, los diferentes municipios de la comarca vivieron el conflicto de forma intensa. Precisamente para recuperar la memoria del papel que desempeñaron los diversos municipios de la comarca, se han creado tres itinerarios que ayudan a comprender cómo fue la Guerra Civil en el Maresme. Impulsado por el Consejo Comarcal de El Maresme e ideado por GRIEGC desde finales de 2017, hemos trabajado en los contenidos y el diseño de las 41 señales que conforman los tres itinerarios repartidos por 10 municipios de la comarca del Maresme.
Los tres itinerarios son:
Itinerario de Defensa de Costas
Itinerario de Retaguardia y Frente
Itinerario de las Embajadas
• Itinerario de Defensa de Costas:
Uno de estos itinerarios implica a las poblaciones costeras de la comarca, que jugaron un papel primordial en la defensa del territorio. A lo largo de todo el litoral, desde Montgat hasta Malgrat de Mar, se construyeron un gran número de posiciones defensivas en primera línea con el objetivo de defender la costa frente a cualquier amenaza de desembarco de tropas franquistas o ataques navales. Esta defensa se basó especialmente en emplazamientos de artillería y multitud de nidos de ametralladoras diseminados por todo el litoral que, hoy en día, en buena parte todavía pueden apreciarse.
Malgrat de Mar
Monumento a los Brigadistas
Batería de costa del Parque del Castillo
Santa Susanna
Nido de ametralladors de la playa de las Dunes
Mataró
Nido de la playa de Sant Simó
Vilassar de Mar
Nido de ametralladoras de la Mar Xica
El Masnou
Nido de ametralladoras de la playa d’Ocata I
Nido de ametralladoras de la playa d’Ocata II
Nido de ametralladoras de la playa d’Ocata III
Nido de ametralladoras de la playa del Masnou
Nido de ametralladoras de Ca l’Antic
Itinerario Retaguardia y Frente:
Otro itinerario también importante pretende dar a conocer cómo estos municipios de la comarca, situados en la retaguardia republicana, tuvieron que hacer frente a las diversas dificultades de la guerra. Desde el inicio del conflicto, la incautación de edificios y su reconversión en otros usos, la necesidad de cambio de producción de las industrias a una industria de guerra o la creación de hospitales para poder atender a los soldados heridos, fueron algunas de las necesidades originadas. Pero también otros, como dar cobijo al gran número de refugiados que fueron acogidos en diferentes municipios del Maresme, o la construcción de refugios antiaéreos para proteger a la propia población civil frente a los temibles bombardeos.
Malgrat de Mar
Torre de l’Esquena – Sede del Comité de Guerra
Seminario de los Maristas – Sede del Comité Antifascista
Escuela Vedruna – Sede de la CNT y para refugiados
Calella
Escuela Pia – Cuartel de Milícias del Maresme
Fábrica Llobet
Sant Vicenç de Montalt
Iglesia – Proyectil italiano
Mataró
Cuartel Artillería – Sede del Consell Comarcal del Maresme
Can Marfà – Indústria de Guerra
Hospital de las Brigadas Internacionales – Escuela dels Salesians
Prisión de Mataró – Centre correccional
Sede CNT, escuelas y lugares para refugiados – Escuela Pia
Almacén de alimentos y Mercado – Basílica
Argentona
Can Garí – Colonia Espartaco
Premià de Dalt
Colonia infantil Negrín Las Acacias
El Masnou
Refugio antiaéreo de la Mina de Aigua
Itinerario de las Embajadas:
El último de los itinerarios es el que da una especial singularidad al Maresme durante la Guerra Civil, porque no tiene lugar en ningún otro territorio de Cataluña. Y es que principalmente a partir de los fatídicos bombardeos del 16, 17 y 18 de marzo de 1938 que tuvo que sufrir la capital catalana y que generó gran cantidad de víctimas, las diferentes delegaciones diplomáticas decidieron trasladar sus embajadas y consulados. Encontraron en algunas poblaciones del Maresme, como Caldes d’Estrac y Sant Vicenç de Montalt por ejemplo, unas localidades tranquilas y cercanas a Barcelona para establecer sus delegaciones. De esta forma, el Maresme se convirtió en una comarca internacional, con embajadas y consulados arraigados en el territorio.
Caldes d’Estrac
Can Bastos – Lugar de residencia del consul francés
Can Boada – Embajada de Costa Rica
Can Carol – Fuerzas de Asalto
Can Marcelino Coll – Consulado Francès
Can Mercè i Garriga – Consulado Britanico
Can Nadal i Garriga– Comité Republicano
Can Soler – Embajada Britanica
Casa de Fusta – Embajada Neerlandesa
Can Puig Marcet – Embajada de Bulgaria
Can Miracle – Embajada Argentina
Torre Seldwyla- Cónsul honorario de Suïza
Caldescans – Consulado de Dinamarca
Sant Vicenç de Montalt
Villa Blanca – Embajada de México y residencia de Azaña
Can Valls – Embajada de Francia (Parque de los hermanos Gabrielistas)
Can Pellicer – Embajada de Suecia
Can Badia – Embajada de Suiza
El valor histórico de estos tres itinerarios queda totalmente justificado por la gran cantidad de vestigios materiales que desempeñaron su papel durante la Guerra Civil, y que todavía se conservan en toda la comarca. Con este trabajo, simplemente se pretende recuperar del olvido todos estos sitios y que se conviertan en una herramienta de memoria colectiva para futuras generaciones.