15 Dic Las Fortificaciones de la Línea del Cinca en El Grado
La posición de El Grado correspondía al sector de Monzón dentro de la Línea Fortificada del Cinca. El inicio de esta línea fortificada se inició a finales de agosto de 1936, pero las obras de fortificación no iban más al norte de Estada. Sin embargo, y petición del coronel Villalba, que tenía su cuartel general en Barbastro, se decidió también seguir fortificando más hacia el norte, siendo el límite Boltaña, inciándose los trabajos de fortificación en este nuevo sector en noviembre de 1936.
Sobre las posiciones defensivas que se construyeron en El Grado, existen varias fuentes que pueden esclarercer este asunto. Así pues, y según una Memoria presentada por el propio ejército republicano a finales de enero de 1937 se decía que tanto las posiciones de Naval como las de El Grado tenían el mismo objetivo, evitar el paso por las carreteras de Boltaña a El Grado, Barbastro a Naval, pasando por La Hoz de Barbastro; y la que iba de La Hoz de Barbastro a El Grado, así como también el paso del río Cinca por la carretera de Barbastro a Graus.
Datos sobre el Puente del Cinca en El Grado
Imagen aérea del puente de El Grado por el río Cinca
Para estos fines se habían construido en los montes de Pisa, próximos a Naval, un emplazamiento para dos piezas de montaña de 105 mm, y para batir la carretera de Naval hacia Barbastro otro emplazamiento artillero para dos piezas iguales, con objeto de batir la carretera que venía de Boltaña. También se construían en esas fechas trincheras para 300 hombres y nidos para ocho ametralladoras, además de los abrigos subterráneos para el personal y el municionamiento.
Por su parte, en el monte de Iñan, que esta muy próximo a El Grado, se emplazarían dos piezas de montaña de 105 mm, que batían el sector que comprendía el puente de la carretera de Graus, la carretera de Barbastro y la de La Hoz de Barbastro. Asimismo, otro emplazamiento, también para dos piezas de 105 mm, podía cruzar sus fuegos con el primero de los emplazamientos de los montes de Pisa.
Igualmente, también se construyeron trincheras para 300 hombres, nidos para doce ametralladoras, con sus abrigos para personal y municiones. Además, y con el objeto de prevenir una infiltración del enemigo, entre Naval y El Grado, se habían construido en los espolones que hay en la izquierda de la carretera, yendo de El Grado a Naval, unas trincheras capaces para 300 hombres y nidos para cuatro ametralladoras; y en el cerro, que hay inmediato a El Grado, en dirección a Naval, un emplazamiento para dos piezas de artillería de montaña y trinchera para 30 hombres.
Finalizaba las informaciones de la Memoria diciendo que todos los atrincheramientos llevaban sus caminos cubiertos, así como los abrigos necesarios para todo el personal y materiales y repuesto de municiones; y para el servicio de estas posiciones –Naval y El Grado- se construían pistas de acceso que tendrían una longitud de vario kilómetros.
Mapa de las fortificaciones de la Línea del Cinca en el sector de El Grado
Por otro lado, según un agente inglés que visitó todas las fortificaciones de la Línea del Cinca en la primavera de 1937, comentaba en un informe que para cerrar el paso a las fuerzas enemigas que pudieran llegar al Cinca partiendo de Sabiñanigo se habían construido obras al oeste del pueblo de El Grado. Tal y como recogía dicho informe, estas obras eran importantes; ya que había una batería para cañones de 105 mm emplazada a una milla al oeste del pueblo. Para llegar a ella se había construido un camino a media ladera, y la batería se había reforzado con cemento armado y profundos refugios. Igualmente, al sur de la batería se había instalado una fuerte posición para infantería que podía contener unos 500 hombres, construyéndose también un camino de más de dos millas para llegar a esta posición. El oficial inglés también dejaba reflejado en su informe que se tenía el proyecto de construir otras obras en la orilla este del Cinca, frente a El Grado; para impedir el paso hacia el importante pueblo de Benabarre.
Por estas mismas fechas aproxidamente, en un informe-resumen de las fortificaciones de la Línea del Cinca se decía que las posiciones de El Grado formaban un centro de resistencia con la misión de impedir el acceso al Cinca por la carretera de Broto y su fácil invasión por las carreteras de Graus a Benabarre. Las posiciones de Naval, Olvena, La Sierra, Coscojuela y Puebla de Castro podían considerarse como complementarias de la anterior, constituyendo un núcleo importante de posiciones defensivas sobre el puente de El Grado y de flanqueo derecho de la línea.
Igualmente, también se decía que existía una Agrupación artillera en el sector de El Grado que comprendía dos emplazamientos de 105 mm y uno de 75 mm formando parte del núcleo defensivo (baterías de Pisa, Rosico e Iñán). Por su parte, las de flanqueo eran: un emplazamiento de 75 mm en Bolturina y dos emplazamientos de sección en Olvena y La Puebla de Castro. El municionamiento de este Sector se hacía por la carretera del Grado y la pista a construir hasta las Torres del Arzobispo, pasando por el puente que sobre Lécera había en el Pantano de Barasona.
Inscripción en el interior de uno de los nidos de ametralladoras de El Grado
Por otro lado, gracias a otra documentación sabemos las obras de las posiciones defensivas que se estaban llevando a cabo a finales del mes de abril de 1937 en el monte Iñan de El Grado. Según esta información, durante el mes de abril se habían construído un total de 20 metros de zanja o camino de comunicación y 24 metros de camino cubierto con llatas y cañizos, siendo éste el total de ambos hasta la fecha. También se encontraba un nido de ametralladoras doble acasamatado terminado.
Por su parte, en lo que a posiciones de artillería se refiere, se habían construído 20 metros de una sección de 75 mm en túnel, siendo el total al final del mes de 40 metros. También se había trabajado en la pista de acceso a las baterías, la cuál se encontraba muy adelantada ya que se habían construído 180 metros, que hacían un total de 930 metros y faltándole solamente 250 metros para finalizarla. Sin embargo no se había avanzado en metros engravados, siendo hasta la fecha 260 los metros totales.
Obras realizadas en el monte Iñan de El Grado en abril de 1937
Por último, otra documentación nos refiere todas las posiciones que existían en El Grado en octubre de 1937 y su estado constructivo. Así pues se decía que existían un total de 250 metros de trincheras, así como cuatro refugios con cuatro metros de tierra sin blindar, tipo de dos bocas de acceso y galería de 8 por 1,50 metros. También se encontraban ya terminados dos nidos dobles de ametralladoras blindados con hormigón y con refugio.En cuanto a la artillería, se encontraban en construcción dos secciones de 75 mm y ya finalizada una pista de acceso a las posiciones artilleras anteriores de una longitud de 3.200 metros.
Interior de uno de los nidos de ametralladoras de El Grado
Refugio en El Grado
Para finalizar, cabe decir que todas estas posiciones defensivas no cumplieron el objetivo con el cual fueron diseñadas debido al rápido avance del ejército del bando sublevado a finales de marzo de 1938. Por lo tanto, todas estas construcciones defensivas supusieron un elevado coste económico y humano que realizó el bando republicano en balde.