01 Nov Las fortificaciones de l’Aldea
La Aldea, situada al sur de la provincia de Tarragona y próxima a la desembocadura del río Ebro, se convirtió en una población tranquila situada en la retaguardia catalana, hasta que empezó la ofensiva del ejército franquista en Aragón el 9 de marzo de 1938. Esta ofensiva quebró las líneas republicanas en tierras aragonesas y en muy poco tiempo, las tropas franquistas ocupaban poblaciones catalanas; culminando el 15 de abril con la llegada de los rebeldes al Mar Mediterráneo y aislando el territorio republicano. De esta forma, la línea del frente se estableció en los ríos Segre y Ebro y la Aldea pasó en poco tiempo, de ser una población situada en la retaguardia a estar en primera línea de combate.
Es precisamente por este motivo que las tropas republicanas crearon una nueva línea de fortificación que iba desde L’Aldea hasta L’Ampolla, para cubrir todo el territorio del delta en el norte del río Ebro. En total eran unos 49 nidos de ametralladoras, repartidos entre los términos municipales de L’Aldea, Deltebre, Camarles y L’Ampolla; orientados especialmente hacia el río Ebro y hacia el litoral que fueron construidos por el Batallón de Zapadores del V Cuerpo de Ejército.
Mapa de la línea de fortificaciones
Las fortificaciones que fueron construidas por esta unidad en L’Aldea fueron inventariadas en un informe por el ejército en los años 40, y nos permite tener una idea de cómo eran todas estas fortificaciones de las que la gran mayoría hoy en día ya no existen. En este informe, donde se acompañan las descripciones y los croquis, todas las posiciones defensivas estaban inventariadas con la letra T seguida de un número que identificaba a los fortines.
En el caso de L’Aldea eran las siguientes:
– T-14. Pequeño nido por fusil ametrallador que se encontraba en la parte izquierda del río Ebro, a 100 metros de la carretera general de Valencia a Barcelona, en el lugar denominado “La Palma” ya unos 200 metros de Amposta. Este nido era todo de piedra, con su interior recubierto con cemento y con una sola aspillera.
– T-15. Fortín ametrallador situado en el sitio denominado “El Canal”. Se encontraba a la derecha de la carretera Valencia-Barcelona a unos 1.200 metros de Amposta y a unos 50 metros separado de la carretera y a unos 700 metros de la estación de ferrocarril de L’Aldea. El fortín, de forma cuadrada, contaba con dos aspilleras y con banquillo por la ametralladora, teniendo su entrada por la parte trasera.
– T-16, T-17, T-18, T-19 i T-20. 5 fortines ametralladores que se encontraban situados en la finca conocida como “La Palma”, a unos 400 metros de Amposta aproximadamente. Todos con las mismas características de estructura cuadrada, entrada trasera y con una sola aspillera y banquillo para ametralladora. Todos estos fortines cruzaban sus fuegos entre sí, siendo la comunicación más cercana la carretera general y la línea del ferrocarril Tortosa-La Cava.
- T-16: Eran dos nidos de ametralladoras situados en el interior de una casa propiedad de campesinos a unos 200 metros de la carretera general.
- T-17 i T-18: Estos fortines estaban situados a 250 metros del anterior fortín T-16, unidos a 10 metros uno del otro.
- T-19: Se encontraba a la misma distancia que el anterior.
– T-26, T-30, T-31, T-32, T-36, T-37, T-41, T-42. 8 fortines ametralladores de estructura cuadrada con aspillera frontal, banquillo para el arma y entrada trasera.
- T-26: Posición situada en el canal a 50 metros del T-15, en el lugar denominado “Cuba”, con su punto de mira hacia Amposta, cruzando sus fuegos con los demás fortines. Se trataba de un nido ametrallador de cemento y hormigón, siendo su nudo de comunicaciones más cercano la estación de L’Aldea y la carretera a unos 700 metros de distancia.
- T-30 i T-31: Estos nidos ametralladores de ladrillo y cemento se encontraban situados dentro de la Finca Bernís, con una distancia uno del otro de 30 metros, cruzándose sus fuegos entre sí con el T-26 , que se encontraba a unos 800 metros.
- T-32: Se encontraba a 500 metros del T-30 y T-31, en el lugar llamado Finca Badia. Contaba con una sola aspillera orientada hacia Amposta, siendo su construcción al igual que los anteriores y cruzando sus fuegos con el T-31 y T-33.
- T-36 i T-37: Eran iguales entre sí, separados sólo 20 metros y cruzando sus fuegos. El primero se encontraba en el interior del convento de L’Aldea, a una distancia aproximada de 600 metros de la estación de ferrocarril de L’Aldea y la carretera general. La otra posición se encontraba dentro del lugar denominado “Cuba”, propiedad de Joan Cuba, en el camino vecinal Amposta-La Cava y orientada su aspillera hacia los arrozales.
- T-41 i T-42: Se encontraban en el lugar denominado “Madisla” a 20 metros uno del otro, situados a 1.500 metros de la carretera general y de la estación de ferrocarril de L’Aldea.
– T-27. Nido ametrallador situado en el interior de una casa de payés. Estaba construido de cemento y hormigón con gruesas vigas de hierro que cubrían el techo con tres aspilleras, orientadas hacia L’Aldea, los arrozales y Amposta respectivamente. Su situación era inmejorable, ya que se encontraba a 1 km de la carretera Valencia-Barcelona, en el lugar denominado “Cuba” a 500 metros de las posiciones 15 y 300 metros de la 26, cruzando sus fuegos con ellos.
– T-28. Se trataba de dos nidos de ametralladoras situados en el interior de una casa de payés de la finques Bernís, cada uno de ellos con una sola aspillera orientadas a los arrozales y Amposta. Estaban situados a 400 metros del T-27 y a 800 metros de la estación de ferrocarril de L’Aldea y de la carretera general Valencia-Bacelona. Su construcción era de cemento y ladrillo con grandes vigas de hierro y cruzaba sus fuegos con el T-27.
– T-29. Fortín ametrallador que se encontraba situado en el interior de la casa de labrador de la finca Mas Bernís. Su construcción era de hierro de vigas con cemento y ladrillos. De planta cuadrada pero con entrada lateral, su única aspillera estaba orientada hacia Amposta, cruzando sus fuegos con la posición T-28 y situado en la misma finca que las posiciones T-30 y T-31, a 1 kilómetro de la línea del ferrocarril y la carretera general.
– T-33, T-34 i T-38. 3 fortines ametralladores de estructura cuadrada y dos aspilleras con una pequeña entrada en la parte trasera. Las posiciones 33 y 34 eran construidas de cemento y hormigón, iguales entre sí.
- T-33: Se encontraba situado a 50 metros de la posición T-32 en la finca Estora. Tenía comunicación con la estación de L’Aldea por un camino vecinal, mientras que el tren Amposta-La Cava se encontraba a unos 2.500 metros.
- T-34: Se encontraba a 100 metros de la posición T-33 en otra finca, situada la posición en el interior de la casa de labrador, cruzándose los dos fortines sus fuegos.
- T-38: Se encontraba a 150 metros de la posición T-37, en el lugar denominado Rabanals a 1 km del pueblo de L’Aldea y de la carretera y el ferrocarril. Estaba situado en el interior de la casa de labrador. Construido de cemento y hormigón con gruesos palos que cubrían el techo.
– T-35. Se encontraba situado en la finca R. Fores a 400 metros de la posición T-34 y a unos 700 metros de la estación de ferrocarril de L’Aldea y la carretera general. Este nido de ametralladoras de cemento armado con vigas gruesas de hierro, se encontraba en el interior de la casa de labrador, y contaba con espacios para dos ametralladoras con dos aspilleras.
– T-39. Se encontraba situado en la finca Rabasals a 1 kilómetro de la línea de ferrocarril y carretera general Valencia-Barcelona. Es un nido ametrallador de cemento y hormigón recubierto similar a la posición T-33, con una sola aspillera, con el techo con gruesos palos de pino. Tenía su entrada protegida por un lateral y con una sola aspillera en una esquina del nido.
– T-40. Se encontraba situada a 900 metros de la anterior posición T-39 y a 1 kilómetro de la estación de L’Aldea en el lugar denominado Punta d’Abad. Era de cemento y hormigón con gruesas vigas de hierro, con entrada trasera y dos aspilleras laterales.
– T-43. Nido ametrallador situado a unos 10 metros de la posición T-42, con el que cruzaba sus fuegos; en el sitio denominado Modislo. Su construcción era de cemento y hormigón, al igual que el T-16. Contaba con una sola aspillera situada en una esquina orientada a los arrozales.